FeSP-UGT plantea un conjunto de propuestas imprescindibles para la Educación y sus profesionales

propuestas Educación y profesionales

Desde FeSP-UGT hacemos balance del curso que acaba de finalizar. El Ministerio de Educación y Formación Profesional empezó su legislatura abordando la reforma de la LOMCE con la presentación de un nuevo proyecto de ley educativa. Debido a la situación política y la disolución del Gobierno, por la nueva convocatoria de elecciones, dicha ley ha quedado paralizada y los cambios que nuestro sistema educativo requiere siguen sin abordarse.

Durante este curso el Gobierno aprobó la Ley 4/2019, de 7 de marzo, Ley de mejora de las condiciones para el desempeño de la docencia y la enseñanza en el ámbito de la educación no universitaria, poniendo fin al aumento de las ratios, a la limitación de las sustituciones del profesorado, a la vez que dejaba en manos de las comunidades autónomas el establecimiento del horario lectivo del mismo. Esta medida, al no tener carácter básico, tal como nuestra organización ha venido exigiendo, va a depender de la negociación y de la voluntad de los territorios de reducir el horario lectivo de los docentes.

De cara al nuevo curso y a la formación de un nuevo Gobierno, desde el Sector de Enseñanza de FeSP-UGT presentamos unas propuestas educativas básicas que consideramos imprescindibles para mejorar el sistema educativo y las condiciones laborales del profesorado.

• Una nueva Ley educativa, con vocación de estabilidad y equilibrio y basada en acuerdos amplios, que garantice el derecho a la educación y en la que la equidad y la compensación de desigualdades sean un eje vertebrador de la misma.

• Aumentar la inversión educativa hasta alcanzar en los próximos años el 7% del PIB como gasto público educativo, así como establecer un compromiso parlamentario de no situarnos nunca por debajo de los niveles de inversión de la media de la UE.

• Aumento y estabilidad de plantillas mediante la oferta de empleo público tal y como recoge el Acuerdo Gobierno-Sindicatos (UGT, CCO, CSIF) para reducir la temporalidad al 8%, así como el desarrollo de un sistema transitorio de ingreso sin pruebas eliminatorias.

• La negociación de un Estatuto de la Función Pública Docente donde se regulen adecuadamente todos los aspectos que inciden en las condiciones laborales del profesorado y se establezca el desarrollo de una adecuada carrera profesional.

• La necesaria recuperación de la pérdida del poder adquisitivo de los docentes con incrementos salariales y con la reversión de los recortes.

• Mantenimiento de la jubilación voluntaria anticipada a partir de los 60 años y reducción voluntaria de la jornada lectiva para los mayores de 55 años, sin reducción de haberes.

• Reducción de la jornada laboral de 37,5 horas a 35 horas semanales, así como la reducción de la carga lectiva: máximo de 18 horas en Secundaria, Bachillerato, FP, EOI y E.R. Especial, y 20 horas en Infantil y Primaria.

Desde el Sector de Enseñanza de FeSP consideramos que no se puede perder de nuevo un curso sin un calendario de negociación que restaure el diálogo social para la mejora de las condiciones sociolaborales de los trabajadores y trabajadoras de la Enseñanza. Desde UGT, consideramos urgente la formación de un Gobierno progresista y reclamamos al próximo equipo ministerial que impulse y promueva las medidas necesarias para abordar los problemas reales que tienen nuestro sistema educativo y sus profesionales.