El Gobierno de Pedro Sánchez no ve posibilidades de abordar con carácter inmediato la transferencia de las Prisiones y de la gestión económica de la Seguridad Social al Ejecutivo Vasco, como reclamaba este martes su portavoz, Josu Erkoreka.
Fuentes del Ministerio de Política Territorial y Función Pública aseguran que «las posiciones están muy alejadas» en estos dos asuntos concretos y subrayan que la prioridad del gabinete que dirige Meritxel Batet pasa ahora por «trabajar rápidamente en lo que puede haber acuerdos inmediatos» como el traspaso de líneas de ferrocarril y autopistas.
En la reunión que mantuvo Íñigo Urkullu con Sánchez a finales del mes de junio en La Moncloa, el lehendakari vasco arrancó el compromiso del Ejecutivo central para crear un grupo «bilateral y permanente» en el que se pudiera estudiar el traspaso de las 37 competencias pendientes en el Estatuto de Gernika. Precisamente, en ese encuentro -aseguran desde el Ministerio-, se acordó dar prioridad a las transferencias en infraestructuras, traspasos y desistimientos y dejar el resto de cuestiones «para una fase posterior».
En cambio, el portavoz del Gobierno Vasco del que forman parte los socialistas de Euskadi exigía en declaraciones a Europa Press que el Ejecutivo socialista ponga en marcha «sin más demora» un grupo de trabajo para transferir la gestión económica de la Seguridad Social y las prisiones. En este sentido, aseguraba que no tolerarán que haya una «resistencia caprichosa arbitraria» para «hacer efectivas» estas transferencias.
«Si en el tema de las Instituciones Penitenciarias hay dificultades, serán derivadas de razones de conveniencia política u oportunidad partidista, que yo no puedo concebir como demócrata», alegaba Erkoreka este martes, recalcando que el obstáculo de ETA ya ha desaparecido y que la Generalitat de Cataluña tiene transferida esta competencia.
Gestos del Gobierno
El Gobierno de Sánchez ha hecho hasta ahora gestos como el acercamiento de dos presos etarras sin delitos de sangre a cárceles vascas o la retirada del recurso que el Ejecutivo de Mariano Rajoy interpuso ante el Tribunal Constitucional contra la Ley de Víctimas de Abusos Policiales. Algo que a Sánchez y, en concreto al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska ya le han valido la crítica de todos los sindicatos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
Sin embargo, sobre los dos asuntos que el Ejecutivo Vasco considera «prioritarios» para esta legislatura, en el Gobierno se limitan a decir que aún «hay mucho que discutir». Ya en el mes de junio, el secretario de Estado de Política Territorial Ignacio Sánchez Amor, reconocía «dificultades serias» para abordar estos asuntos «sensibles». En cualquier caso, las fuentes destacan que se mantiene la voluntad de cambiar el «clima» que reinaba durante la etapa del Gobierno del PP.
La relación entre el PNV y los socialistas vascos atraviesa momentos de dificultad debido a las discrepacias en torno al nuevo estatus para Euskadi, que busca ser «un estado soberano dentro del Estado español» y que los ‘jeltzales’ sólo han conseguido consensuar con EH Bildu
