UGT, cuya prioridad durante el proceso ha sido mantener los empleos, reclama una revisión del modelo de Mutuas que evite un baile de fusiones
La Federación de Empleadas y Empleados de los Servicios Públicos (FeSP) de UGT ha valorado positivamente la fusión entre Mutua Gallega e Ibermutuamur, acordado en Junta Directiva. Con este acuerdo concluye un largo trance, plagado de incertidumbres, sobre el futuro de la entidad y sus trabajadores. El sindicato ha vigilado este proceso, asesorando y poniendo a disposición de los empleados las estructuras de UGT.
Para UGT, la prioridad ha sido, en todo momento, defender los más de 300 puestos de trabajo existentes y garantizar su sostenibilidad. Con el actual acuerdo, se mantendrá el empleo y las condiciones de trabajo de la antigua plantilla de Mutua Gallega serán las mismas que las de Ibermutuamur.
Los posibles procesos de fusión entre mutuas solo pueden producirse por acuerdo entre las entidades o por encontrarse alguna de ellas en situación financiera que permita la toma de medidas cautelares por parte del gobierno. En el caso de Mutua Gallega, la reserva de estabilización de contingencias profesionales se redujo hasta el 20,05%, por debajo del mínimo legal del 30% establecido en el art. 95 de la Ley General de Seguridad Social.
La Secretaría de Estado de la Seguridad Social ha dedicado elogios a los gestores de Mutua Gallega, al tiempo que les exime de cualquier responsabilidad con respecto a los factores estructurales objetivos que han ocasionado la situación presente.La organización sindical plantea cómo se llega al actual escenario de Mutua Gallega, si los directivos son profesionales de primer nivel y los trabajadores han desempeñado de manera excelente su labor. Las únicas explicaciones son el fracaso global del modelo de mutuas o la insuficiencia financiera para la gestión de la contingencia común.
Si la explicación del Gobierno fuese esta última, bastaría con aprobar un incremento en la fracción de cuota para atender la contingencia común. Sin embargo, nada parece indicar que el Gobierno vaya a proceder a incrementar dicha fracción de cuota por entender que la actual es suficiente.
UGT exhorta al Gobierno a revisar a fondo el sector para resolver los fallos estructurales y evitar un previsible baile de fusiones que, finalmente, puede afectar negativamente a los más débiles del proceso: los trabajadores. Es necesaria la intervención directa del Ejecutivo y de entidades y personas con voluntad de resolver esta situación, sin otros intereses que mantener los puestos de trabajo y prestar unos excelentes servicios.
