La Federación de Empleados de los Servicios Públicos de UGT (FeSP-UGT) cree que ha llegado el momento de poner en valor dentro del sistema educativo a los centros educativos de economía social y a las cooperativas de enseñanza.

La red de cooperativas de enseñanza, integrada por más de 600 centros educativos y casi 27.000 trabajadores, de los cuales más de 13.000 son trabajadores contratados por cuenta ajena, se ha constituido como una vía necesaria basada en un modelo cooperativo, en el asociacionismo y que ofrece un servicio público que alcanza a 280.000 alumnos y alumnas.

FeSP-UGT valora, en estos momentos más que nunca, la labor de los trabajadores y trabajadoras de las cooperativas de enseñanza por ser integrantes, desde su puesto de trabajo al servicio de la educación, de un modelo educativo participativo, democrático, cooperativo y perfectamente ensamblado dentro del sistema público educativo.

De la misma manera, FeSP-UGT quiere reconocer en estos momentos difíciles la labor de las estructuras organizativas de las cooperativas de enseñanza como modelo asociativo generador de empleo que, frente a las estridencias y la crispación, ha optado por afrontar lo peor de la crisis sanitaria de la Covid-19 manteniendo el teletrabajo y  aportando soluciones para el mantenimiento de la actividad y del empleo.

FeSP-UGT, sindicato representativo dentro del ámbito de las cooperativas de enseñanza, con más de un centenar de representantes de los trabajadores entre sus centros, recuerda los numerosos acuerdos alcanzados a lo largo del tiempo entre el sindicato y el mundo cooperativo en la enseñanza, tanto en el ámbito estatal, autonómico como a nivel de centro de trabajo.

En este sentido, FeSP-UGT reivindicará una consideración específica para las cooperativas de enseñanza y sus trabajadores dentro del futuro Real decreto de conciertos que el sindicato viene reclamando al Ministerio de Educación y Formación Profesional.