Sorprendente propuesta patronal para cerrar el convenio de distribución farmacéutica

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La negociación del convenio sectorial quedó frustrada por no existir acuerdo entre las partes. Después de dos reuniones en el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA), previas a la convocatoria de huelga por el desbloqueo del convenio, al final el equipo mediador hizo una propuesta que no fue aceptada por la patronal, procediéndose a la convocatoria formal de huelga.

Cuando deberíamos haber realizado las jornadas de paros se declaró la emergencia sanitaria por la Covid19 y en un ejercicio de responsabilidad por la parte social, se desconvocaron los paros, días después se paralizó el mundo y con ello las reuniones, acercamientos y todos nos dedicamos a luchar contra el virus.

Hace unos días decidimos que debíamos hablar con la patronal para dar algún tipo de tranquilidad al sector, sobre todo a los trabajadores y trabajadoras que como esenciales, no habéis dejado de trabajar en ningún momento de la pandemia y sin embargo, lleváis con el salario congelado desde 2018.

La reunión se ha producido hoy por videoconferencia, ha sido corta pero intensa y nos queda la sensación de que se quiere aprovechar el clima de caída de la actividad mundial y la previsión de crisis económica para incrementar los salarios de las plantillas lo menos posible.

Así, empezó FEDIFAR la exposición inicial hablando de crisis, de recordar la anterior y cómo se acometió desde el sector con mesura, cuando el sector como ahora, no ha tenido ni va a tener una situación tan complicada como otros sectores, ya que no le ha afectado cierre alguno durante el estado de alarma, si acaso le ha beneficiado, para acabar haciéndonos una propuesta que supone cerrar 2019 y medio 2020.

La patronal nos pide contención salarial ante la crisis venidera, pero en la época de bonanza siempre es reacia a equilibrar los salarios, como se demuestra que llevamos año y medio de negociación frustrada y una convocatoria de huelga, y todo para que cumplieran lo recomendado por CEOE y sindicatos, en cuanto a subidas salariales.

La propuesta fue la siguiente:

  • Incremento para 2019 del 1.8% (recordad que sería el 1.2% real, por el 0.6% que les debemos al adelantarlo en algunas empresas de la revisión de 2018)
  • Incremento para 2020 el IPC real, una vez conocido en enero de 2021, lo que quiere decir que no cobraríamos ningún incremento en 2020 y todo ello, si el IPC es positivo.

La parte social respondimos que no podíamos aceptar de ninguna manera, un incremento pírrico para 2019 ya que el año estaba pasado, no había crisis de ningún tipo y todas las empresas habían tenido beneficios, y que en el caso de 2020 tampoco podíamos aceptar que no hubiese ningún incremento hasta enero de 2021. Después de un receso les hicimos una propuesta de cierre de 2019 y 2020, en las siguientes condiciones:

  • Incremento 2019 en un 1.9%
  • Incremento de 2020 un 0.5% con revisión al alza sobre el IPC
  • Respeto de los redactados y cuestiones que teníamos acordados, como plus de nocturnidad, premios de fidelidad, defunción, permisos, etc.

Además, el planteamiento social incluyó la posibilidad de que la vigencia del convenio se extienda hasta el 31 de diciembre de 2021, dando la posibilidad de que en materia de incrementos salarial, y siendo conscientes de la incertidumbre, se habilite la reunión de una comisión que pueda acordar los incrementos salariales para ese año.

Pensamos que no se puede aprovechar el escenario de una futura crisis para seguir congelando el salario de las personas trabajadoras del sector. Sobre todo, porque al ser un servicio esencial, ni se ha parado la actividad, ni las empresas han dejado de vender incluso consiguiendo el objetivo antes de lo previsto, siendo un sector con ventas aseguradas incluso aunque se produjera una gran crisis.

Seguimos manteniendo que el sector se merece un convenio digno y sin trabas porque no las hay.

EL Covid19 no es la excusa para contener salarios y menos en el sector sanitario, tanto desde el Ministerio de Trabajo como desde los Sindicatos se está defendiendo que la subida salarial es necesaria para fortalecer el consumo interno, y es un deber de los sectores menos afectados tirar del carro del crecimiento. Lo contrario, la contención salarial solicitada, los ERTEs injustificados a cuenta de los impuestos y salarios de sus plantillas, etc., solo retratan o retratarían la nula responsabilidad social de esta patronal.