«Defendemos la financiación pública de servicios públicos de agua y saneamiento de calidad para hacer efectivos los derechos de la mujer»

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Con motivo del Día Mundial del Agua, celebrado el 22 de marzo, la Secretaria General de la ISP, Rosa Pavanelli, señala la importancia de unos servicios financiados con impuestos de agua y saneamiento para todos, pero especialmente para hacer efectivos los derechos de la mujer. En una entrevista*, Rosa Pavanelli se pronuncia acerca de los principales desafíos existentes para lograr este objetivo.

¿Cuál es la situación actual de la falta de acceso al abastecimiento de agua y el saneamiento?
Según el informe de la OMS/UNICEF, en todo el mundo, más de mil millones de personas carecen de acceso a un abastecimiento de agua adecuado; esto representa más del doble de las que no disponen de saneamiento básico. Se estima que el agua no apta para el consumo, el saneamiento inadecuado y la higiene deficiente representan el 9,1 % de las enfermedades mundiales y el 6,3 % de todas las muertes, las cuales afectan de manera desproporcionada a los niños menores de cinco años. En el mismo informe se indica que la escasez de estas necesidades básicas también influye en la carga de trabajo, seguridad, educación y equidad de la mujer. El acceso a agua limpia, y su disponibilidad, es un prerrequisito para el crecimiento y desarrollo sostenibles de las comunidades de todo el mundo.

¿Por qué las mujeres y no los hombres?
Los hombres pobres también sufren. Pero las mujeres tienen una relación crucial con el agua, a causa de la división sexual del trabajo que ha perpetuado «naturalmente» la atribución de roles y funciones sociales a hombres y mujeres. Donde hay escasez, las mujeres y las niñas son las administradoras del agua. Por este motivo, el acceso universal al agua y el saneamiento es fundamental para liberar a la mujer de esa carga y ayudarla a acceder al mercado de trabajo, de modo que se favorezcan la igualdad, la dignidad y la emancipación y autonomía socioeconómicas de las mujeres.

¿Dónde existen las principales tensiones?
En numerosos lugares. Por ejemplo, las empresas mineras necesitan agua para conseguir valiosos minerales a partir de la roca desnuda. Durante el año 2005, se calcula que se extrajeron 4020 millones de galones al día con fines mineros en los Estados Unidos de América. Las empresas mineras son los mayores contaminadores del agua y se benefician en numerosos países de generosos incentivos fiscales, exenciones fiscales temporales y otro tipo de concesiones que se otorgan para atraer la inversión de las empresas. Para la ISP, esas contradicciones son inaceptables.

En un reciente estudio conjunto de Christian Aid, ActionAid International, Third World Network Africa, Tax Justice Network Africa y Southern Africa Resource Watch se indica la medida en que las empresas mineras privan rutinariamente a los países africanos de enormes cantidades de ingresos fiscales. En América Central y del Sur, las tensiones también se han intensificado con motivo del aumento de conflictos por la tierra y el agua con las empresas mineras. Las mujeres, una vez más, son las más afectadas, aunque, a la vez, están en la primera línea de la resistencia. Y cito algunos ejemplos.

En 2016, en San José del Golfo (Guatemala), a la comunidad le preocupaba que el proyecto minero condujera no solo a la destrucción de sus tierras, sino también de su agua. Las mujeres levantaron barricadas en un movimiento denominado La Puya, que tiene enorme credibilidad tanto dentro como fuera del país.

En el sur del Ecuador, 2000 soldados intervinieron en una operación militar para desalojar a los residentes de la comunidad shuar de Nankints. El Frente de Mujeres Defensoras de la Pachamama está resistiendo el desplazamiento forzado que se está produciendo debido a la proliferación de proyectos mineros en el país.

En Honduras, en julio de 2016, se produjo la muerte de Lesbia Yaneth, defensora de los derechos de las comunidades y contraria a otorgar concesiones y privatizaciones de ríos en La Paz, y miembro de Copinh, la misma organización a la que también pertenecía Berta Cáceres, quien obtuvo el año pasado el prestigioso premio Goldman en materia ambiental, y que también fue asesinada en su casa en marzo tras haber recibido docenas de amenazas de muerte en relación con su oposición a la represa de Agua Zarca en el río Gualcarque, que, según ella, se estaba construyendo sin el consentimiento de la población local.

¿Qué defienden?
Pedimos la transparencia, la reparación social y la responsabilidad fiscal y ambiental de las empresas mineras. Necesitamos ese dinero perdido y toda el agua desperdiciada para nuestro pueblo, especialmente para los niños, niñas y mujeres, para nuestras comunidades y para nuestra ecología. Defendemos la financiación pública de servicios públicos de agua y saneamiento de calidad para todos.

Leer en línea: http://www.world-psi.org/es/defendemos-la-financiacion-publica-de-servicios-publicos-de-agua-y-saneamiento-de-calidad-para-hacer