Protejamos el aire que respiramos

Protejamos aire respiramos

El 5 de junio celebramos cada año desde 1974, el Día Mundial del Medio Ambiente. Fue establecido por las Naciones Unidas, conscientes de la necesidad de protección y el mejoramiento del medio en el que vivimos.

Cada año, el Día Mundial del Medio Ambiente se centra en un tema diferente con el objetivo de  concienciar al público sobre la importancia de mejorar nuestro medio ambiente. El tema de  2019 es la «Contaminación del aire», ya que estamos ante un  grave problema que afecta a millones de personas en todo el mundo.

Actualmente, nueve de cada diez personas están expuestas a niveles de contaminación del aire que superan los estándares de seguridad dictados por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Aproximadamente 7 millones de personas en todo el mundo mueren prematuramente cada año a causa de este problema, siendo un factor de riesgo más peligroso que el consumo de alcohol o la inactividad física. Además, la contaminación atmosférica provoca e intensifica una gran variedad de enfermedades.

La contaminación del aire, no solo afecta a la salud humana, también tiene impactos negativos sobre el crecimiento económico (la contaminación del aire le cuesta a la economía global 5.000 millones al año) y el calentamiento global.

En este día debemos reflexionar sobre qué podemos hacer para reducir la contaminación atmosférica que ayude a mejorar nuestra salud y el aire que respiramos. Para ello tenemos que estar informados y saber  qué causa la contaminación del aire y los diferentes tipos de contaminación.

La contaminación atmosférica proviene principalmente de cinco actividades humanas, el hogar con la quema en interiores de combustibles fósiles, madera y otros combustibles de biomasa para cocinar, calentar y encender fuegos, la industria gran emisor con las centrales eléctricas que queman carbón, mientras que los generadores diésel suponen una preocupación creciente en áreas desconectadas de la red eléctrica, el transporte que representa casi un cuarto de las emisiones de dióxido de carbono relacionadas con la energía, proporción que va en  aumento. Las emisiones del transporte se han relacionado con casi 400,000 muertes prematuras, la agricultura con el ganado, que produce metano y amoníaco, y la quema de residuos agrícolas. Alrededor del 24% de todos los gases de efecto invernadero emitidos en todo el mundo provienen de la agricultura, la silvicultura y otros usos del suelo y los residuos la quema de residuos a cielo abierto y los desechos orgánicos en los vertederos liberan a la atmósfera dioxinas nocivas, furanos, metano y carbono negro todas,  perjudiciales para la salud humana.

Nueve de cada diez personas en todo el mundo están expuestas a niveles de contaminación que superan los niveles de seguridad señalados por la OMS.

Como dice el Secretario General de la ONU “Necesitamos una economía verde, no una economía gris”.

Está en nuestras manos, es  hora de actuar ya!